Una de las siluetas más reconocibles de la marca. El Chevrolet El Camino salió al mercado para competirle al Ford Ranchero allá por 1959, aunque empezó a escribir su historia en letras grandes cuando en 1964 hizo su aparición la segunda generación, donde el modelo comenzó a basarse en la plataforma del Chevelle (que también figura en esta lista). En sus comienzos contó con impulsores normales para la época, como los 6 cilindros en línea y los V8 de bloque pequeño; pero más tarde, en la tercera generación, entró en escena la increíble versión SS, que escondía bajo el capó un V8 de 6.5 litros y en contados casos el colosal "454" de 7.4 L que entregaba 450 CV y 677 Nm de torque que también traía el Chevelle.