Su difusión por todas partes del planeta le ha convertido en el hito del automóvil económico por antonomasia. Entre los años 1948 y 1990 se produjeron 3.872.583 unidades del 2CV y 1.246.306 unidades con la carrocería furgoneta, lo que hace un total de 5.118.889 unidades fabricadas. Mención especial merece la suspensión, la que está compuesta por brazos longitudinales, sujetos en uno de sus extremos al chasis y tensados por varillas fijadas a unos resortes helicoidales dispuestos longitudinalmente en posición horizontal a cada costado. Este diseño único lleva al típico andar cabeceante y suave del 2CV.